Crónica de un cumpleaños inesperado

Navegamos los mares del alma en busca del viento 

No hay nada más terso, más puro que el brillo del momento 

Rayamos las nubes con lenguas rellenas de anhelos 

Comimos relámpagos diáfanos bebimos truenos...

Hola  hola mis muy estimados fans, vuelvo a este espacio para platicarles cómo me fue en mi vigésimo sexto cumpleaños... Bueno primero que nada quiero agradecer a los compas que se tomaron un tiempito para escribirme un mensajito y mandarme sus buenas vibras, los quiero mil.

Pues bien, los festejos comenzaron desde el viernes 15 con una cena acompañada de mi hermana y nuestro sabonim del TKD. Sin embargo el sábado fue un día trascendental y no sólo porque era mi cumpleaños, sino que además por la noche iría a una boda acompañada de May. Claro que todo el día navegué entre la felicidad y la incertidumbre... con la sensación permanente de vivir en un deja vu... Remontemos a mi cumpleaños número 24, mis amigos me organizaron una fiesta genial y como plus Don asitiría a acompañarme en ese día tan feliz...y para no hacerles largo el cuento pues Don no fue y yo lloré cual oriunda de Magdala.

Entonces aunado a mi experiencia anterior, tenía horror sólo de pensar que de último minuto May me fuera a dejar plantada. Los minutos transcurrieron lentos como la cuaresma y para las 7 pm May no me había llamado, hasta que a las 7:30 ocurrió que  me marcó para preguntarme a que hora quería que pasara por mi. Fui la persona mas feliz del mundo, he de resaltar porque iría a la boda acompañada por la persona que me gusta...

Llegamos al salón y así muy normales los dos; sin embargo, al ratito ya no se pudo resistir, me besó y me tomó de las manos y así frente a mi hermana y su novio, permanecimos abrazados muy romanticones jajaja y bailamos un rato, porque cabe destacar que llevaba unos tacones de una altura imposible jajaja. Y todo estuvo bien hasta que se llegó el tan famoso ritual de "Aventar el ramo", es el evento en el que todas las solteras desesperadas corren en busca de tan preciada precea para asegurar que no morirán solteronas.  Pues bien, las hermanas de Lioncourt han hecho de este ritual un deporte extremo en el que ambas con sus habilidades taekwondoís compiten por el ramo. Y comenzó la música y corrimos como lo marca el ritual y cual fue nuestra sorpresa que el ramo cayó justo a los pies de ambas, pero como las dos llevábamos tacones muy altos y vestidos muy cortos, no sabiamos como agacharnos.... La tía Pan hizo un movimiento arriesgado para agacharse sin mostrar mas de lo debido, sin embargo no contaba con que la pequeña Titía la utilizaría como apoyo para agacharse de una manera elegante y decente, pero como la vida es un chiste y sólo a mi me pasan este tipo de cosas... cuando Titía se apoyó en mi yo perdí el equilibrio y caí cual vaquilla en rodeo jajajaja casi creo que hasta el número de serie se me vió u_u' jajajajaja. Y cómo no, una vez mas empuñé el ramo de novia como si fuera el Martillo de Thor  jajaja.

Claro que el chiste no acaba ahí porque cabe destacar que el ramo parecía un artilugio que usan las adivinadoras para barrer a la gente de las malas vibras jajaaj. Así que ahora me dedico a leer las manos, hacer amarres, desamarres y dos que tres truquillos para el amortssss jajaja.

Después de la boda nos fuimos a cenar y posteriormente fui besada de nuevo por tan lindo muchacho :)...

Estoy muy contenta, porque por fin mi corazón ha sanado, puedo besar sin pensar en el pasado, sólo enfocándome en el presente, en el sabor de sus besos... qué bonito cuando el corazón sana...